- “La Universidad de Colima (UdeC) está abierta para recibir a los padres que quieran conocer y resolver dudas sobre quiénes y cómo les están enseñando a sus hijos, así como los problemas que están enfrentando”, agregó el profesor investigador de la Facultad de Pedagogía.
Para el Dr. Antonio Gómez Nashiki, autor del libro “Educación y pobreza rural: La enseñanza en un contexto crítico”, es importante que los padres y madres de familia se acerquen a la universidad para revisar el desempeño académico de sus hijos, “ya que es en ellos en quienes recae la responsabilidad de vigilar el avance de los alumnos y alumnas”.
Profesor-investigador de la Facultad de Pedagogía de la Universidad de Colima, Gómez Nashiki dijo en entrevista que el acercamiento de los padres de familia hacia la institución debe ser algo natural, ya que de esta manera están al pendiente del proceso de enseñanza-aprendizaje de sus hijos e hijas.
Sin embargo, comentó, cada vez es más difícil hablar con los papás y las mamás, “ya que en educación superior, a los alumnos les da pena que sus padres vengan; éste es un factor que merma la comunicación de los padres y madres de familia con el profesorado”. Otro factor, agregó, es la idea que existe de que los padres no pueden acercarse a la universidad, por lo que ellos mismos forman la barrera que dificulta el acercamiento.
Es momento, aseguró, de que los padres de familia cambien esa mentalidad para mejorar la situación de aprendizaje de sus hijos e hijas; “la Universidad de Colima está abierta para recibir a los padres que quieran conocer y resolver dudas sobre quiénes y cómo les están enseñando a sus hijos, así como los problemas que están enfrentando”.
Destacó que en la Universidad de Colima hay canales de comunicación para favorecer este acercamiento, entre ellos el director o directora del plantel, la y los orientadores y hasta el profesorado; “para eso no hay ninguna restricción”.
En cuanto a las y los jóvenes de nuevo ingreso y su adaptación a la modalidad presencial, comentó que hace falta realizar un diagnóstico profundo para identificar qué habilidades, tanto en lo emocional como en los aspectos educativos, se han afectado; “no podemos hacer una generalización y decir que a todos les fue bien en la pandemia, ya que no es lo mismo tratar con un estudiante que perdió a un familiar que con otro al que no le sucedió absolutamente nada, con los que trabajaron y se dedicaron sólo unas horas a cumplir sus actividades educativas o aquellos que sólo estuvieron en sus casas, relajados, sin trabajar. Cada quien tuvo una experiencia diferente en la pandemia”.
En este sentido, comentó que la Universidad cuenta con un tutor grupal y el servicio de tutorías para trabajar con las y los alumnos que enfrentan situaciones complicadas en este regreso presencial, “pero resulta que los estudiantes no confían muchas veces en estos espacios; les cuesta trabajo asistir, así que las sugerencias hacia el profesor o profesora es que se acerquen a los estudiantes, ya que su papel es fundamental para que los alumnos salgan adelante, sin ser tan paternalistas”.
Finalmente, dijo que además de los profesores, cuya función es necesaria para que las y los alumnos continúen con éxito su desarrollo académico, es importante contar con la participación de los padres y madres de familia y atender sus situaciones emocionales y académicas en el momento que ocurran, “por fortuna, la Universidad de Colima cuenta con buenos canales para atender a los y las estudiantes y ayudarlos a que hagan frente a sus problemas”.